Si hay algo que podemos considerar característico a partir del año 2020 es el trabajar desde remoto y tener reuniones remotas por video llamada. Las reuniones consecutivas se han convertido en la norma, una conversación termina, comienza otra y no hay posibilidad de estirarse, tomar un vaso de agua o simplemente aclarar la cabeza.
Microsoft, uno de los proveedores más importantes de tecnología para videollamadas (Teams), publicó recientemente un estudio sobre el impacto del trabajo remoto en nuestros niveles de cansancio y agotamiento.
Para el estudio realizado en marzo de 2021 por el Laboratorio de Factores Humanos de Microsoft, los investigadores pidieron a un grupo de personas que participaran en videollamadas durante dos días mientras usaban un equipo que monitorea la actividad cerebral, los participantes tuvieron cuatro reuniones de media hora consecutivas un día, y el otro día tuvieron descansos de 10 minutos con una meditación incluida entre las reuniones.
La investigación mostró que los descansos entre reuniones reducen la acumulación de estrés, cuando los participantes tuvieron la oportunidad de descansar comenzaron su próxima reunión en un estado más relajado, sin acumulación de estrés, incluso mientras continuaban cuatro videollamadas.
Además se vio reflejado que las reuniones consecutivas disminuyeron la capacidad para concentrarse y participar, cuando los participantes tuvieron descansos mostraron un mayor compromiso durante la reunión. Esto muestra que es más difícil mantenerse concentrado y comprometido cuando el cerebro experimenta estrés.
Cuando los participantes no tenían descansos, el momento de la transición entre llamadas provocó que sus niveles de estrés aumentaran. Esto indica que solo el hecho de saltar directamente de una reunión a otra puede provocar picos de estrés.
Estos hallazgos confirman que nuestro cerebro funciona de manera diferente cuando tomamos descansos. Tener reuniones virtuales consecutivas puede estresarnos y distraernos y los descansos son muy importantes, no solo para estar menos agotados al final del día, sino para mejorar nuestra capacidad para concentrarnos y participar de manera activa en las reuniones.
El antídoto para enfrentar la fatiga es simple: tomar descansos breves.
Tomar descansos entre las videollamadas evita que se acumule el estrés, ayudan a participar mejor y mantenerse comprometido. Los descansos no solo son buenos para el bienestar, sino que también mejoran nuestra capacidad para hacer nuestro mejor trabajo. Tomarse cinco o diez minutos para desconectar de la pantalla y recuperar la energía puede marcar una gran diferencia.
En el mundo actual de trabajo remoto e híbrido, no basta con fomentar el autocuidado, necesitamos innovar y aprovechar la tecnología para ayudar a las personas a generar cambios que permitan desarrollar nuevas normas culturales y mejorar su bienestar, a medida que cambiemos al trabajo híbrido, continuaremos aprendiendo y desarrollando nuevas prácticas y herramientas para mejorar la forma en que trabajamos juntos en este nuevo mundo más digital.
¿Estás preparado para acompañar a tus colaboradores en este entorno remoto? ¿escuchas y conoces su experiencia en tiempo real? ¿Cómo estás adaptando tus herramientas y prácticas?